n 2023 la Secretaría de Salud informó que 35.6 millones de personas en México han recibido servicios de prevención y atención en adicciones.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define a la adicción como un trastorno de salud mental y un trastorno del comportamiento caracterizado por la necesidad compulsiva de consumir una sustancia. Las adicciones implican una pérdida de control sobre el comportamiento, así como una dependencia física y/o psicológica del objeto de adicción.
Además, pueden manifestarse de diversas formas, incluyendo la dependencia de sustancias como el alcohol, las drogas ilícitas, los medicamentos recetados o el tabaco.
Síntomas
Los signos y síntomas de una adicción pueden presentarse de manera variada y afectan diferentes aspectos de la vida de una persona. La sintomatología depende del tipo de adicción, no obstante, en Top Doctors España se plantea una descripción detallada de los síntomas comunes:
Necesidad compulsiva de consumir la sustancia o realizar la actividad
Con el tiempo, la persona puede desarrollar tolerancia a la sustancia o actividad adictiva, lo que significa que necesita consumir cantidades cada vez mayores.
Cuando la persona intenta reducir o detener el consumo de la sustancia o la actividad adictiva, puede experimentar síntomas físicos y psicológicos desagradables conocidos como síndrome de abstinencia.
La adicción puede causar dificultades significativas en diversas áreas de la vida de la persona, como el trabajo, las relaciones personales, la salud física y mental y las responsabilidades diarias.
Tratamientos
Sesiones de terapia familiar, grupal o individual. Atención médica según las necesidades de cada paciente, como la desintoxicación. Medicamentos. Terapia conductual.
Estimulación magnética transcraneal
Que tiene el objetivo de modular la actividad
cerebral en áreas específicas relacionadas con la
recompensa y el reemplazo parcial del estímulo
al cual es adicto el paciente. Los craving por el
consumo, son los factores más importantes de
abandono terapéutico y los causantes de las
caídas en el consumo después de largos períodos
de abstinencia, sobre todo porque resurgen
durante y después del tratamiento, por ello, la
estimulación magnética ayuda al control de los
impulsos y a la toma de decisiones. Al aplicar
pulsos magnéticos focalizados en estas regiones,
se busca influir en la plasticidad cerebral, es
decir, en la formación de nuevas conexiones
que reemplacen la adicción y en los circuitos
neuronales involucrados en la adicción.